Un escarabajo de con 230 millones de años ya extinto fue descubierto este domingo por científicos de la Universidad de Uppsala de Taiwán.
La muestra de heces contenía abundantes partes del cuerpo de los escarabajos, donde la mayoría pertenecían a una especie pequeña.
Los científicos, utilizaron una técnica llamada microtomografía de sincrotrón para reconstruir modelos 3D de los escarabajos, las cuales suponen se encontraban atrapados en la materia fecal fosilada.
Finalmente, los científicos creen que el animal poseía un hocico largo, que le servía como pico.